La soledad de los numeros primos

Me corté el pelo.
Me haría mil tatuajes nuevos.
Quiero cambiar.
Quiero ser otra.
Tener otra historia.
Necesito lo nuevo.
Pero no me gusta esta novedad.
Siento que el tiempo se me escapa de las manos.
No me gusta.
Quiero salir pero quedarme en casa.

Me irrito por todo.
Quizas son esos dias.
Quizas es cuestión de tiempo.
Quizas soy yo.

Creo que estoy cayendo ahora en la realidad.
La maldita realidad que me dice que él ya no está conmigo.
Y que no está porque no quiere estar.
La realidad que me muestra que lo que esperaba de lo nuevo no es tan bueno.
La realidad que me hace sentir que lo extraño. Que ahora somos dos extraños.
No me daba lo que quería y sin embargo no me importaba.
Mi amor alcanzaba para los dos.
Es tan triste como el libro que leí: La soledad de los numeros primos.
Así es la vida en realidad.

Él es todo lo contrario a lo que quiero y, sin embargo, es lo que quiero.
Si pudiera volver el tiempo atrás cambiaría tantas cosas.
Pero no dejaría de elegirlo a él.
Lo quiero así, como es, con sus mierdas y todo.
Y nadie lo entiende.
Y yo tampoco lo entiendo.
Pero es que hay cosas que no tienen sentido.
Y se me acaba de ocurrir la estúpida idea de escribirle al celular.
No se me venía esta idea desde hace mucho.
Por qué ahora?
Por qué justo cuando aparece alguien mas en mi vida?
O es justamente por eso?

Quiero emborracharme hasta no entender nada.
No quiero estar sola.

él me dejó él me dejó él me dejó él me dejó él me dejó él me dejó él me dejó él me dejó él me dejó él me dejó él me dejó él me dejó

Tengo que repetirmelo mil veces hasta entenderlo.


dulcinea.